Al escuchar el nombre del azafrán, conocido como el “oro rojo”, muchas personas piensan en su precio y en alimentos especiales, pero además de ser la especia más cara del mundo, el azafrán es una medicina eficaz para una amplia gama de enfermedades. Esta eficacia se debe a que las investigaciones demuestran que, a diferencia de muchos medicamentos químicos, esta planta casi no tiene efectos secundarios en dosis normales.
La mayoría de las propiedades medicinales del azafrán (Crocus sativus) se deben a sus principales componentes, como la crocina, la crostina y el safranal. Según numerosos estudios, el azafrán y sus ingredientes eficaces se han utilizado como antioxidantes, antiinflamatorios y analgésicos, antidepresivos, antitusígenos, anticonvulsivos, potenciadores de la memoria, reductores de la presión arterial y anticancerígenos.
A continuación tendremos una breve introducción al mundo del azafrán como medicina.
Efecto antídoto del azafrán
En estudios realizados en animales (principalmente in vitro), al exponer diferentes tejidos como el cerebro, corazón, hígado, riñón y pulmón a algunas sustancias tóxicas, ya sean venenos naturales o químicos, se han comprobado los efectos antídotos y protectores del azafrán y sus principales compuestos.
Los efectos protectores del azafrán y sus principales componentes contra toxinas naturales y toxicidades inducidas químicamente han sido objeto de diferentes estudios, pero la eficacia del azafrán como antídoto o agente protector en la intoxicación humana significa que necesitamos estudios clínicos para llegar a hallazgos más confiables.
El mágico extracto acuoso de azafrán
Los hallazgos de dos estudios diferentes realizados por Ranjbaran et al. y Fadai et al. revelaron que en el cerebro de la rata, la síntesis de neurotransmisores esenciales como la dopamina y el glutamato se activó y potenció cuando utilizaron el extracto acuoso de azafrán, a una concentración de 250 mg/kg.
Además, Zuluaga et al. informaron la capacidad del extracto acuoso de azafrán para bloquear el estrés oxidativo mediante la modulación de la transducción de señales en las células endoteliales vasculares humanas.
El azafrán en la medicina tradicional
Desde tiempos prehistóricos, los pueblos de algunos países asiáticos han desarrollado conocimientos tradicionales sobre los efectos terapéuticos del azafrán. Los primeros registros sobre el uso médico de esta especia en Oriente Medio y el sur de Asia se remontan al siglo XII a. C. Es probable que los habitantes del antiguo Irán fueran los primeros en cultivar el azafrán por sus necesidades medicinales.
Los iraníes como los primeros
En la medicina tradicional iraní, propiedades como el fortalecimiento general del cuerpo, regulador del sistema vascular y nervioso (SN), reducción de los efectos del desamparo y la depresión, tratamiento del insomnio, sarampión y disentería se enumeran en las propiedades de azafrán, y a pesar del alto precio, además de decorar los alimentos con su maravilloso color y aroma hacen del Crocus sativus una de los medicamientos más importantes de la medicina tradicional iraní.
En Irán, el insomnio, los fuertes dolores de cabeza y las obstrucciones en la zona de la cabeza y el cuello se curan con una preparación de infusión de azafrán.
El conocimiento de esta planta medicinal no se limita a Irán, y casi todas las naciones civilizadas, incluidas la antigua Grecia, Roma, Egipto, India, Marruecos, Jordania y China, se han ido familiarizando gradualmente con las diversas propiedades de esta especia-medicina desde la antigüedad.
Una larga lista de beneficios en la India
En la antigua medicina india, se recomienda beber extracto de agua de azafrán para curar problemas de la piel, asma, artritis y problemas renales y digestivos. Los indios también tienen la experiencia de que esta planta en forma de polvo es útil para aplicación externa en heridas, hinchazones o sangrado severo.
Además, los indios utilizan el polvo de azafrán para tratar la visión deficiente, las cataratas y la ceguera. En combinación con ghee, actúa contra la diabetes y es eficaz para reducir el agrandamiento del bazo y del hígado.
Como tónico fortalecedor del organismo, en general, el Crocus sativus puede estimular las defensas inmunitarias y conducir a una mejora general de la salud física y mental del organismo. La lista de propiedades beneficiosas del azafrán en la India es mucho más larga. Esta especia es un medicamento antiséptico y antiinflamatorio, cura las infecciones bacterianas y fúngicas, las inflamaciones, las picaduras de insectos y también la apoplejía. También es eficaz contra una amplia gama de problemas estomacales. Es posible estimular las contracciones uterinas en el embarazo con dosis bajas de esta especia, y si se utilizan dosis altas y sin cuidado, puede provocar espasmos y contracción general del cuerpo de la embarazada. Es un ingrediente cosmético natural popular en la medicina iraní e india para mejorar el tono de la piel y, como parte de la medicina popular, aclara la piel.
Finalmente, en la medicina tradicional india, el extracto acuoso de azafrán en combinación con otros medicamentos es eficaz para el acné, la erisipela, la piel, las heridas y enfermedades cutáneas similares, además de reducir el dolor de articulaciones dolorosas y dislocadas, esguinces o huesos rotos.
Los indios, al igual que los iraníes, lo utilizan contra la depresión y trastornos mentales similares.
Romanos, egipcios y griegos
Uno de los usos más interesantes de esta planta lo tenían los antiguos romanos, quienes solían añadir esta planta a los vinos de sus fiestas para evitar las resacas y las intoxicaciones que provocaba el consumo de vino. Heridas de la piel o de las mucosas para reducir problemas de salud ocular como dolor, infecciones o cataratas y para curar algunos trastornos menstruales son los casos en los que los antiguos egipcios y griegos utilizaban el azafrán para tratar. En particular, en la medicina tradicional griega, esta especia se utilizaba como medicamento para infecciones urinarias y renales, y su combinación con miel se ha mencionado como diurético.
Actividad citotóxica del azafrán
La actividad maligna en la que las células anormales se multiplican de manera descontrolada y continua y pueden invadir los tejidos sanos circundantes se denomina cáncer. Este tipo de actividades pueden dar lugar a la formación de un tumor en otra parte del cuerpo.
Se han investigado los efectos antitumorales del extracto de azafrán o sus derivados en una amplia variedad de modelos de estudio de células aisladas. En todos estos estudios se ha demostrado que las células sanas no se ven afectadas por el tratamiento con azafrán, lo que significa que el azafrán desarrolla efectos citotóxicos selectivos en dosis micromolares.
Cáncer de pulmón, mama y leucemia
Diferentes concentraciones (100, 200, 400 y 800 μg/mL) de extracto acuoso de azafrán exhibieron efectos citotóxicos y proapoptóticos cuando se investigaron en la línea celular de cáncer de pulmón A549. Samarghandian et al. Realizaron un estudio in vitro y concluyeron que al contener algunos compuestos activos como la crocina, el azafrán es capaz de reducir la proliferación de las células A549 de forma dosis-dependiente.
En otro estudio realizado por Vali et al. en una línea celular de cáncer de mama (MCF-7), las combinaciones de crocina con radiación gamma o paclitaxel produjeron un efecto sinérgico al aumentar la apoptosis y disminuir la tasa de supervivencia de las células.
Otro enfoque adoptado por Mousavi et al. [62] en la línea celular MCF-7 tratada con extracto acuoso de azafrán (100, 200, 400 y 800 μg/mL) utilizando el ensayo de azul tripán para investigar los cambios morfológicos de las células bajo un microscopio invertido, así como la expresión genética de la metaloproteinasa de matriz (MMP). Los grupos de tratamiento indicaron una reducción significativa en los niveles del gen MMP en comparación con el grupo de control. Las MMP establecen las reglas y dan orden para controlar la vía de señalización que gestiona el crecimiento celular, la inflamación o la angiogénesis; las MMP pueden ser un objetivo principal en el tratamiento del cáncer y la inhibición de la metástasis.
Se realizó un estudio para tratar HeLa con un extracto etanólico de azafrán y sus compuestos indicaron que la crocina, el safranal y la picrocrocina pueden inhibir el crecimiento celular de manera dependiente de la dosis, mientras que la crocetina no tuvo ningún efecto sobre la proliferación celular.
Al examinar el efecto de la crocina sobre las células de leucemia promielocítica humana y las células HL-60 en el laboratorio, Sun et al. descubrieron que la crocina (0,625-10 mg/ml) inhibía significativamente la proliferación de células HL-60 de forma dosis-dependiente. También observaron que la crocina puede inducir el arresto del ciclo celular en la fase G0-G1 en HL-60 mediante citometría de flujo usando tinción con yoduro de propidio.
Otro estudio fue realizado por Tuberoso et al. [65] en el que se evaluó la citotoxicidad de la infusión de azafrán mediante el ensayo MTT en la línea celular de cáncer de colon Caco-2; la viabilidad celular fue del 30% a las 48 h de tratamiento con infusión de azafrán (10 μL/mL), mientras que a las 24 h de tratamiento, la viabilidad celular fue del 32% pero solo a una concentración mayor (50 μL/mL).
Solución del problema de la resistencia
Las neumonías, otitis, diarreas, infecciones cutáneas y otras infecciones bacterianas son provocadas por gérmenes de difícil tratamiento. Son el resultado de la actividad de bacterias de la categoría de gérmenes gramnegativos como Enterobacteriaceae, Streptococci, Escherichia coli o Salmonella.
El tratamiento con antibióticos es el principal método para combatir este tipo de infecciones bacterianas y son muy eficaces en la mayoría de los casos, pero su uso excesivo y generalizado ha provocado resistencia a los antibióticos.
El significado de esta resistencia en este caso es que el uso excesivo de todo tipo de antibióticos conduce a la compatibilidad de las bacterias con los antibióticos y, como resultado, el tratamiento de las infecciones se vuelve cada vez más difícil. El uso excesivo de antibióticos puede dañar la flora microbiana saprofita que facilita la digestión y refuerza el sistema inmunológico. Los efectos secundarios de esta pérdida de actividad son trastornos digestivos, diarrea y reacciones alérgicas. En estas difíciles condiciones, en las que tanto el coste del tratamiento como la duración del mismo preocupan a los pacientes, muchos se plantean nuevamente la posibilidad de recurrir a tratamientos naturales alternativos con efectos antibacterianos comprobados.
Actividad antimicrobiana del azafrán
Kakouri et al. realizó un estudio en el que se investigaron dos extractos de tépalos de Crocus sativus (un extracto contenía la parte aglicona de los flavonoides y el otro contenía glicósidos de flavonoides) para evaluar la actividad antimicrobiana de los extractos contra seis especies bacterianas.
El extracto que contenía la parte glucosídica de los flavonoides mostró una actividad antimicrobiana débil. El extracto de tépalo que contenía agliconas registró la mejor capacidad antimicrobiana.
Hussein et al. El estudio indicó una fuerte actividad antibacteriana del extracto de azafrán contra E. coli y Staphylococcus aureus a una concentración de 100 μg/mL. Afirmaron que el extracto metanólico de crocina posee la mayor actividad antibacteriana contra E. coli y S. aureus en comparación con otros pigmentos de azafrán. Además, los resultados de Hussein y sus colegas demostraron que el efecto antibacteriano de la crocina es aproximadamente igual al del cloranfenicol y la ciprofloxacina (conocidos como antibióticos estándar) en una concentración de 100 μg/mL.
Se realizó otro estudio para evaluar la actividad antimicrobiana del extracto acuoso de azafrán recolectado de diferentes áreas de Irán utilizando 3 bacterias diferentes mediante una prueba de placa de pocillos modificada donde se realizaron diferentes concentraciones de extracto y se evaluaron en función de la zona de inhibición del crecimiento en la que algunas de ellas tenían actividad antimicrobiana (S. aureus y E. faecalis) mientras que otras no tenían actividad detectable (E. coli).
Propiedades antioxidantes del azafrán
Antes de revisar las propiedades antioxidantes del azafrán, echemos un vistazo al estrés oxidativo como un tema fundamental en el desarrollo de cáncer.
¿Qué es el estrés oxidativo?
El estrés oxidativo es el término utilizado para las enfermedades causadas por especies reactivas de oxígeno (ROS) llamadas radicales libres y se define como el desequilibrio entre oxidantes y antioxidantes, a favor de los oxidantes, con potencial destructivo y patogénico. Dependiendo de su intensidad, el estrés oxidativo puede producirse intra o extracelularmente. El estrés oxidativo intracelular puede provocar necrosis celular o una desorganización celular más o menos marcada, con efectos catastróficos en el caso de una célula que no puede reproducirse. El estrés oxidativo extracelular también es citotóxico.
Componentes antioxidantes mágicos del azafrán
Entre los componentes del azafrán, la crocetina tiene una actividad antioxidante más fuerte (DPPH (2,2-difenil-1-picril-hidrazil-hidrato)) que el safranal, y el potencial de la crocetina fue equivalente al del Trolox y el butilhidroxitolueno.
Diferentes ensayos in vitro, incluyendo antihemólisis, ensayo de eliminación de radicales libres DPPH, peroxidación lipídica in vitro, poder antioxidante reductor férrico, método de fosfomolibdeno, quelación de metales y potenciales reductores, en conjunto, mostraron que la crocina, el extracto etanólico de azafrán y diferentes extractos de Crocin chrysanthus exhibieron una actividad antioxidante significativa; sin embargo, esta actividad se ve afectada por el tipo de solvente utilizado, por lo que pueden estar involucrados en el tratamiento de varias enfermedades a través de eliminadores de radicales libres.
Al tener una capacidad antioxidante más fuerte en las células de feocromocitoma de rata (PC-12) (un tipo de tumor neuroendocrino) que el agente antioxidante estándar α-tocoferol, la crocina podría revertir los resultados del daño a la membrana celular y mejorar el nivel de superóxido dismutasa en neuronas estresadas oxidativamente.
Bukhari et al. investigó los efectos del Crocus sativus en células epiteliales bronquiales estresadas mediante la combinación de citocinas. Su estudio ilustró que el azafrán y, especialmente, sus componentes (safranal y crocina) pueden disminuir el óxido nítrico (NO), inducir los niveles de óxido nítrico sintasa (iNOS) y la generación de iones peroxinitrito y prevenir la liberación de citocromo c.
Diferentes mecanismos para luchar contra los factores cancerígenos
La exposición a los componentes del azafrán puede reducir la peroxidación lipídica y, además, puede prevenir el aumento de los marcadores de estrés oxidativo inducidos por el diazinón a través de su actividad de eliminación de radicales libres. Los sinaptosomas estriatales aislados de cerebros de ratas que también están expuestos a componentes del azafrán mostraron protección mitocondrial y de peroxidación lipídica contra la toxina del ácido 3-nitropropiónico que puede ocurrir cuando se inicia el tratamiento con azafrán.
Los bulbos, tépalos y hojas del azafrán
Otro estudio ilustró que los bulbos, tépalos y hojas del azafrán son antioxidantes eficaces. El estudio mostró que los extractos de hojas de azafrán también tienen actividad antioxidante a través de la inhibición total de la oxidación del β-caroteno a 10 μg/mL y una actividad eliminadora de DPPH mayor (hasta 32 veces) que las reportadas para fuentes tradicionales de antioxidantes; se mostró un efecto similar con el extracto de tépalo, el extracto de bulbos de azafrán también fue un antioxidante, pero por una semana.
Efectos antiinflamatorios del azafrán
de Hoz et al. realizaron un estudio para investigar los efectos neuroprotectores y antiinflamatorios del extracto de azafrán en un modelo de glaucoma. Descubrieron que el recuento de glóbulos blancos, el recuento de neutrófilos, el recuento de eosinófilos y el número de plaquetas en la sangre de ratas sensibilizadas a la ovoalbúmina se pueden mejorar con extractos hidroalcohólicos de oro rojo.
El azafrán contra los trastornos cerebrales
Hosseini y M. R. Eshraghian en su ensayo clínico aleatorizado controlado con placebo sobre Crocus sativus concluyeron que el azafrán puede tener un efecto positivo sobre la depresión y los antojos de comida entre mujeres con sobrepeso y depresión leve a moderada. El azafrán estimula el aumento de serotonina y dopamina en el cuerpo. La serotonina es una hormona que crea euforia y placer en una persona. La dopamina también transmite el mensaje de alegría y euforia, y de esta manera, el azafrán ayuda a tratar la depresión (azafrán y depresión).
Muchos investigadores han destacado que el efecto del azafrán en el tratamiento de este trastorno y trastornos similares es igual al de medicamentos como la imipramina y la fluoxetina. Si bien estos medicamentos tienen diferentes efectos adversos, se ha informado que el azafrán no tiene efectos secundarios.
Muchas otras investigaciones han demostrado que el azafrán tiene un efecto positivo en el tratamiento de diversas enfermedades del sistema nervioso y de nuestro cerebro, incluido el Alzheimer y el Parkinson, y puede actuar como complemento a los medicamentos convencionales en este campo.
En la línea de alcanzar estudios clínicos
Una revisión exhaustiva de la evidencia clínica existente del azafrán y sus ingredientes activos contra los trastornos humanos realizada por Hosseinzadeh H et al. informó que la enfermedad de Alzheimer, la depresión, la ansiedad, el síndrome premenstrual, el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno por déficit de atención con hiperactividad, el trastorno del sueño, el dolor, el accidente cerebrovascular isquémico y la esclerosis múltiple son las enfermedades en las que podemos presenciar el mayor número de estudios clínicos sobre las propiedades medicinales del azafrán.
Sin embargo, los efectos del azafrán y sus componentes sobre los trastornos neurológicos no se limitan sólo a los casos mencionados, también hay estudios “preclínicos” que evalúan los efectos del azafrán en el trastorno de estrés postraumático, dolores neuropáticos, esquizofrenia, lesión de la médula espinal, temblor, lesión cerebral traumática e isquemia cerebral, pero aún no han llegado a la fase clínica.
Conclusión
Los compuestos químicos del oro rojo tienen una amplia gama de efectos beneficiosos, incluidas propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antitumorales y antidepresivas, y antiinflamatorias que ayudan a proteger contra diversas enfermedades y trastornos.
Numerosos experimentos con animales e in vitro prometen que el extracto acuoso de azafrán, y especialmente sus componentes activos, es decir, crocina, crostina y safranal, tienen una gran capacidad para tratar o reducir los efectos adversos de una amplia gama de enfermedades. Sin embargo, debemos esperar los resultados de los estudios clínicos para juzgar este tipo de propiedades mágicas del azafrán.
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Preguntas frecuentes
¿Los efectos protectores del extracto de azafrán se limitan al cáncer?
Las propiedades medicinales de las especias más caras del mundo traerán un futuro brillante a quienes las padecen o están en riesgo de padecerlas debido al uso de numerosos principios activos en el tratamiento, prevención o control de las complicaciones de diversas enfermedades físicas y mentales.
¿Puede el azafrán ser tóxico?
Numerosos estudios demuestran que el azafrán en dosis normales no es tóxico y lo más interesante es que ataca de forma selectiva a las células cancerosas. Sin embargo, el consumo de más de 5 gramos provoca intoxicaciones que ponen en peligro la vida y la economía de la persona.
¿Qué componente del azafrán puede tener una actividad antibacteriana?
El efecto antibacteriano del extracto metanólico de crocina es aproximadamente igual al cloranfenicol y la ciprofloxacina (conocidos como antibióticos estándar) en una concentración de 100 μg/mL para derrotar a E. coli y Staphylococcus aureus.
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